Nº Colegiada: M-35203
Graduada en Psicología por la Universidad Complutense de Madrid, así como Psicóloga General Sanitaria por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo. Especialista en Ansiedad ,especialista en terapia integradora y perspectiva de apego y EMDR.
En un mundo donde nuestras relaciones son fundamentales, ¿te has preguntado alguna vez qué influencia tienen nuestras experiencias pasadas en la forma en que nos relacionamos hoy en día? En este artículo, exploraremos cómo nuestras vivencias tempranas, moldean la forma en que interactuamos con los demás.
Apego y Trauma: Dos Caras de la Misma Moneda
El vínculo emocional que desarrollamos desde la infancia con nuestras figuras de cuidado es lo que conocemos como apego. Sin embargo, cuando estas experiencias están marcadas por eventos traumáticos, pueden surgir desafíos significativos en nuestra capacidad para relacionarnos saludablemente.
El trauma, serían aquellas experiencias dolorosas o perturbadoras que pueden afectarnos profundamente. A veces, el trauma puede interferir con el desarrollo normal del apego.
Patrones de Apego y Relaciones Adultas
Nuestro estilo de apego infantil a menudo se refleja en nuestras relaciones adultas. Si hemos experimentado un apego seguro, es probable que confiemos en los demás y mantengamos vínculos estables. Pero si hemos experimentado un apego ansioso o evitativo, es posible que tengamos dificultades para confiar o para acercarnos a las personas.
El Rol del Trauma en las Relaciones
El trauma puede afectar profundamente nuestras relaciones. Las heridas emocionales del pasado pueden resurgir en nuestras interacciones actuales, afectando nuestra capacidad para confiar, comunicarnos y establecer intimidad emocional con los demás. Puede hacernos más propensos a la desconfianza o a reaccionar exageradamente en situaciones difíciles. También puede hacer que revivamos emociones dolorosas del pasado cuando nos enfrentamos a desafíos en situaciones actuales.
Sanando Relaciones a Través del Entendimiento
Entender cómo nuestras experiencias pasadas influyen en nuestra forma de vincular es el primer paso para sanar. La terapia puede ser útil para trabajar en nuestros patrones de apego y para procesar el trauma, permitiéndonos construir relaciones más saludables y significativas en el presente. Aprender a comunicarnos de manera abierta y honesta también puede fortalecer nuestros vínculos.
Conclusión
Nuestras relaciones están moldeadas por nuestras experiencias pasadas, pero no están determinadas por ellas. Al comprender cómo el apego y el trauma influyen en nuestras interacciones, podemos tomar medidas para sanar y construir relaciones más saludables y satisfactorias en el presente. Reconociendo el impacto de nuestras experiencias pasadas, podemos cultivar relaciones más satisfactorias y significativas en nuestras vidas.